BRASILIA, 23 jul (Reuters) – La inflación anual al consumidor brasileña en el mes hasta mediados de julio subió a máximos de cinco años, según datos oficiales divulgados el viernes, una cifra mayor a la prevista que probablemente cimente expectativas de otra alza agresiva de las tasas de interés del banco central.
El anual Índice Nacional de Precios al Consumidor Amplio 15 (IPCA-15) subió a 8,6% desde 8,1% un mes antes, informó el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE), máximo desde septiembre de 2016 y más que la mediana del 8,5% pronosticada en una encuesta de Reuters a economistas.
Hace un año, la inflación anual rondaba el 2%.
La tasa de inflación mensual de 0,72% a mediados de julio fue menor que el 0,83% del mes anterior, pero también fue más alta que la estimación del sondeo de Reuters de 0,64%.
Según el IBGE, los precios subieron en siete de los nueve grupos de bienes y servicios cubiertos.
Los costos de vivienda, que incluyen los precios de la electricidad, aumentaron un 2,14% en el mes, lo que representa un tercio del aumento general, indicó la agencia nacional de estadísticas.
Dentro de eso, los precios de la electricidad subieron un 4,79% en el mes, frente a un alza del 3,85% el mes anterior.
Los costos de transporte aumentaron un 1,07% en el mes, lo que representa casi una cuarta parte del aumento general, dijo el IBGE, aunque eso marcó una desaceleración desde junio.
La meta de inflación de fin de año del banco central es de 3,75% con un margen de error de 1,5 puntos porcentuales a cada lado, y su meta central para el próximo año es de 3,50%.
El banco central elevó su tasa de interés referencia Selic este año a 4,25% desde 2,00%. Es probable que la vuelva a subir el 4 de agosto al 5,00%, o tal vez incluso más.
El director del banco central, Roberto Campos Neto, ha dicho que el emisor utilizará todas las herramientas a su disposición para garantizar que se cumpla su meta de inflación para 2022. (Reporte de Jamie McGeever, Editado en español por Janisse Huambachano)
