Yakarta, 12 ene (EFE).- Indonesia, el cuarto país más poblado del mundo, comenzó este miércoles a administrar las dosis de refuerzo de la vacuna contra la covid-19 en medio de la preocupación sobre la expansión de la variante ómicron.
La campaña prioriza la inoculación gratuita en ancianos y personas con problemas de salud con el objetivo de blindar contra el virus a esta población de riesgo, aunque también será ofrecida al resto de la población, apuntó la víspera en un vídeo el presidente indonesio, Joko Widodo.
Indonesia, que desde el inicio de la pandemia ha registrado 4,26 millones de casos y más de 144.000 muertos, superó entre junio y septiembre de 2021 su peor ola de contagios y decesos.
Este martes, las autoridades confirmaron 802 nuevos infectados, la cifra más alta en los últimos tres meses, y 8 fallecidos.
Las autoridades observan preocupadas el avance de la variante ómicron a lo largo de las islas densamente pobladas del archipiélago y consideran que podría acelerar el ritmo de contagios en las próximas semanas hasta llegar a su pico en febrero.
En la actualidad, solo el 54,5 % de la población diana -estimada en 208 millones de personas del total de 270 millones de habitantes del país- han recibido la pauta completa de la vacuna contra la covid-19, mientras el 77,2 % ha recibido al menos una, según cifras oficiales.
