Antes de que Dario Antonio Úsuga David, alias Otoniel, fuera extraditado a Estados Unidos reveló 64 nombres de políticos, instituciones, exmandatarios regionales y funcionarios públicos que estaban vinculados con el paramilitarismo. Entre esos se destaca el senador Miguel Ángel Pinto, quien le pidió a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) rectificar lo que había dicho el líder del Clan del Golfo; sin embargo, el tribunal rechazó esa solicitud.
“Este listado lo compone un grupo de gobernadores, alcaldes, concejales, diputados y contratistas de hace 15 años; pero yo nunca he sido contratista y, para esa época, tampoco era congresista”, explicó Pinto en un comunicado compartido en sus redes sociales. Para el senador, era necesario que la JEP verifique la información, “pues ser vinculado a un escándalo con el que nunca he tenido relación, sin duda, afecta mi buen nombre”.
Este lunes, la Sala de Reconocimiento rechazó la solicitud de aclaración que interpuso Pinto después de que los magistrados concluyeran que no hay lugar para ello. “La parte resolutiva no envuelve razonamientos o expresiones que planteen motivos de duda, esto es, que adolezcan de falta de certeza o tornen problemático su entendimiento de un nombre señalado por un testigo”, explicaron los togados.
Los magistrados de la JEP también entregaron en detalle una parte de la conversación en la que Otoniel menciona al congresista. “Del Bloque Centauros este Miguel Ángel Pinto Hernández era también de allá. Estaba un representante a la Cámara que era Leónidas Ortega también pertenecía al Casanare”, comentó el líder del Clan del Golfo en su declaración.
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En el momento en el que se le preguntó cuál es la relación de Miguel Ángel Pinto, Otoniel manifestó que la organización criminal debía hacer un “trabajo social” en varias comunidades para que votaran por el candidato. Hablando puntualmente de la relación del congresista con el cabecilla, Úsuga explicó que nunca habló con él: “Yo con ese personaje no hablé, sino que lo que era el apoyo que había en la región era eso… que les colaboraba que la gente votara por ellos para que salieran elegidos en el Congreso”.
Este es un fragmento de la conversación expuesto por la entidad, explicando por qué Otoniel no habló personalmente con Pinto:
— O sea, ¿usted directamente no habló con él, pero supo que hubo alguna reunión, por lo que le entiendo? — le preguntó el magistrado del macrocaso a Otoniel.
— Todos los políticos, en esa época, que fueran a hacer campaña con la región, tenían que reunirse con la organización (…) porque uno era el comandante militar, el comandante del frente, entonces uno delegaba a los comandantes políticos para que hicieran la reunión con ellos… hicieran los compromisos con ellos.
Al finalizar la conversación, Otoniel reveló que Miguel Ángel Pinto habló con alias Pachito; sin embargo, quien solía estar a cargo de dichas reuniones era William Mayorga, “llevaba todos los enlaces que eran políticos y contrataciones a donde nosotros”, agregó.
Cabe recordar que Dairo Antonio Úsuga David se encuentra actualmente en una cárcel de Brooklyn, Estados Unidos, a la espera de juicio en ese país luego de haber sido extraditado desde Colombia. Antes de ser trasladado entregó a la JEP su verdad respecto al conflicto armado en Colombia.
El presidente Iván Duque y las autoridades estadounidenses han enfatizado que, a pesar de su extradición, Otoniel seguirá colaborando con la justicia colombiana para entregar su testimonio respecto a la guerra, especialmente en la zona de Urabá.
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