Uno de los grandes ausentes en el partido homenaje de Juan Román Riquelme fue Martín Palermo. El Titán alegó que no pudo asistir a La Bombonera y aclaró ante los medios los motivos de su faltazo al evento tras el triunfo del equipo al cual dirige, Platense, ante Arsenal, en Sarandí, por la fecha 21 de la Liga Profesional de Fútbol.
“Estamos con los tiempos muy justos. Fijate la hora que es, son las seis y diez (el partido homenaje estaba a punto de comenzar) y todavía no nos hemos ido. Los chicos tienen que terminar de bañarse y obviamente la desconcentración es en el hotel y la verdad que por los tiempos se sabía que se me iba a hacer difícil estar ahí y poder acompañarlo a Román en su despedida”, comunicó Palermo en conferencia de prensa.
La presencia del máximo goleador de la historia de Boca Juniors, quien ya había tenido su partido homenaje el 4 de febrero de 2012, estaba complicada debido a que debía estar en cancha de Arsenal para dirigir al Calamar. Riquelme lo había invitado cuando anunció su despedida, pero se sabía de la posibilidad de que ambos ídolos de la historia xeneize no pudieran reencontrarse donde hicieron felices a los hinchas.
Además de Palermo hubo otras ausencias de peso para homenajear a Román. Uno de ellos fue Guillermo Barros Schelotto, otro de los integrantes del plantel campeón con Carlos Bianchi en la era dorada del club. Quien sí participó fue su mellizo, Gustavo. El director técnico de la selección de Paraguay había confirmado su presencia, pero a último momento desistió dado a un compromiso familiar con su hijo.
Otras bajas importantes fueron la de Claudio Paul Caniggia, quien agradeció la invitación del vicepresidente de Boca, pero por encontrarse en Europa tampoco pudo estar presente en La Bombonera. “Lo conozco bien desde chico, lo vi crecer a los 17 años cuando llegó a Boca”, dijo el Pájaro. En tanto que Carlos Tevez, también invitado al evento, no fue porque está de vacaciones.
Miguel Ángel Russo, otro de los entrenadores que marcó la carrera de Riquelme y fue el técnico que le dio la última Copa Libertadores al club en 2007, no asistió por su compromiso en Rosario Central, que jugaba al mismo tiempo ante Colón de Santa Fe por la Liga Profesional.
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