¿Vas a beber sin moderación? Esto es lo que le pasa a tu cuerpo estando “crudo”
La cruda, conocida también como resaca en algunos países, es un conjunto de síntomas físicos y mentales que siguen al consumo excesivo de alcohol. Los signos más comunes incluyen dolor de cabeza, sed intensa, fatiga, náuseas, sensibilidad a la luz y al ruido, mareos, y a veces ansiedad o irritabilidad.
Estos síntomas ocurren generalmente después de que el efecto del alcohol disminuye en el cuerpo, y son resultado de la deshidratación, los desequilibrios electrolíticos, la disminución de la azúcar en sangre y los efectos del alcohol en el sistema inmune, entre otros factores.
La severidad de la cruda puede variar dependiendo de la cantidad de alcohol consumida, la hidratación, la alimentación, y la tolerancia individual al alcohol. Para mitigar sus efectos, se recomienda beber agua, descansar y consumir alimentos ligeros.
Muchas personas experimentan un conjunto de síntomas desagradables después de consumir alcohol, entre los que se incluyen dolor de cabeza, sed intensa, fatiga, debilidad, náuseas, dolor muscular, vértigo e irritabilidad, condiciones que se agrupan bajo el término de resaca o cruda. Nayeli Ortiz Olvera, académica de la Facultad de Medicina de la UNAM, brinda una explicación científica sobre las causas detrás de estos síntomas, describiéndolos como los efectos de una “intoxicación etílica” que causa daño e inflamación en el organismo.
La cruda, conocida científicamente como veisalgia, tiene varios efectos en el cuerpo debido principalmente a la metabolización del alcohol y su impacto en diferentes sistemas. Los síntomas más comunes incluyen:
- Deshidratación: El alcohol es un diurético, lo que significa que incrementa la producción de orina, llevando a la deshidratación. Esto puede manifestarse en sed intensa, sequedad en la boca y mareos.
- Alteraciones en el sistema gastrointestinal: El consumo excesivo de alcohol irrita el revestimiento del estómago, lo que puede provocar náuseas, vómitos o indigestión.
- Desequilibrio Electrolítico: Además de perder líquidos, la producción aumentada de orina también puede causar un desequilibrio de electrolitos en el cuerpo, como el potasio y el sodio, los cuales son cruciales para el funcionamiento normal de las células y órganos.
- Baja en azúcar en sangre: El alcohol puede interferir en la producción de glucosa y su liberación en el cuerpo, lo que puede provocar sensaciones de debilidad, temblores y, en casos severos, convulsiones.
- Perturbaciones del sueño: Aunque el alcohol inicialmente puede inducir el sueño, interfiere en la calidad del mismo, resultando en un sueño fragmentado y no reparador, lo que contribuye a la sensación de fatiga y agotamiento.
- Respuesta inmunológica: Existe evidencia de que el consumo excesivo de alcohol puede suprimir ciertos aspectos de la respuesta inmunológica, haciendo al individuo más susceptible a infecciones.
- Dolor de cabeza y migrañas: La deshidratación y los vasos sanguíneos dilatados pueden causar dolor de cabeza. Además, ciertos componentes encontrados en diferentes tipos de alcohol pueden desencadenar migrañas en algunas personas.
- Alteraciones en el humor y la cognición: El alcohol afecta al sistema nervioso central, lo que puede llevar a cambios de humor, irritabilidad, dificultad para concentrarse y un deterioro en las habilidades cognitivas.
El desarrollo de una resaca no afecta a todas las personas de igual manera; factores como la velocidad de ingesta del alcohol, la cantidad consumida y las características individuales de cada persona desempeñan un papel crucial. Por ejemplo, se detalla que una cerveza promedio de 330 ml contiene entre 10 a 15 gramos de alcohol. Este dato subraya la variabilidad en el contenido alcohólico de las bebidas y cómo este influye en la severidad de la resaca.
La investigación y los comentarios de Ortiz Olvera arrojan luz sobre un tema de salud pública relevante, considerando las diversas maneras en que el alcohol puede afectar al cuerpo humano. Estas explicaciones buscan fomentar una mayor comprensión sobre los efectos del consumo de alcohol y la importancia de tomar decisiones informadas en torno a este.