la actual temporada de la Liga MX, los equipos Atlas, Tijuana y Puebla se encuentran al borde de incurrir en una significativa deuda económica con la directiva del campeonato, debido a la nueva normativa impuesta desde el año 2020 que elimina el descenso, pero establece multas para los clubes que finalicen en los últimos tres puestos de la tabla general.
Este cambio, ideado como un mecanismo para preservar la estabilidad financiera de los equipos, implica que en lugar de descender a una división inferior, estos equipos enfrentan sanciones económicas que oscilan entre los 33 y los 80 millones de pesos.
Con apenas unas jornadas restantes para concluir el torneo Clausura 2024, la situación para los equipos mencionados es crítica. Atlas, con 10 puntos; Tijuana, acumulando 8 puntos; y Puebla, en la posición más baja con tan solo 5 puntos, deben mejorar su rendimiento en el campo para evitar ser sancionados con estas cuantiosas multas.
La imposición de estas sanciones económicas ha generado un debate en torno a su efectividad como herramienta para fomentar la competitividad y calidad del fútbol mexicano, ya que desde su implementación, el descenso ya no es una preocupación para los clubes.
¿Cómo pinta el panorama para los equipos de la Liga MX este Clausura 2024?
La modificación estructural en el sistema de competición del fútbol mexicano, que desde hace un tiempo abolió el descenso y el ascenso entre su máxima categoría y la Liga de Expansión MX, trajo consigo nuevas medidas económicas que afectan directamente a los clubes con menor rendimiento deportivo en la denominada ‘liga de plata’.
Esta decisión, tomada para estabilizar y fortalecer el ecosistema futbolístico nacional, ha introducido penalizaciones económicas significativas para aquellos equipos que culminen el torneo en las posiciones más bajas de la tabla.
Estas sanciones no solo tienen el propósito de incentivar un mejor desempeño deportivo, sino que además buscan recolectar fondos esenciales para el desarrollo y la mejora de la infraestructura de los clubes pertenecientes a la Liga de Expansión.
El cálculo del porcentaje no se hace a través de un sistema simplista, sino que se basa en un cociente que evalúa el rendimiento de los clubes tomando en cuenta los puntos ganados durante la fase regular de los últimos tres años, sin incluir los partidos de liguilla o fases de eliminación directa, para así reflejar de manera más precisa el desempeño general a lo largo del tiempo.
Desde el Torneo Apertura 2021 y hasta el actual Clausura 2024, se han sumado los puntos de cada club en las fases regulares, estableciéndose así sanciones económicas para aquellos equipos que ocupen las últimas posiciones en la tabla de porcentaje.
En este sistema, el último lugar deberá aportar 80 millones de pesos a la Liga MX, mientras que las penas para los equipos en el penúltimo y antepenúltimo lugares serán de 47 y 33 millones de pesos, respectivamente.
La tabla general del Clausura 2024 es liderada por Toluca, América y Cruz Azul, todos con 29 puntos, seguidos de cerca por Monterrey con 28 y Necaxa con 27. Este panorama revela una competencia intensa en la parte alta de la tabla, mientras que en la zona de riesgo, Atlas, Tijuana y Puebla luchan por escapar de las últimas posiciones y las consecuentes multas financieras.
La estructura de competencia de la Liga MX, basada en un cociente que promedia el desempeño de los equipos a lo largo de las tres últimas temporadas, busca garantizar un criterio justo para determinar la posición de cada club, más allá de sus resultados inmediatos.
¿Cuándo vuelve el descenso a la Liga MX?
La suspensión del descenso en la Liga MX, programada originalmente hasta el 2026, podría verse modificada dado el interés de reintegrar esta dinámica en la competencia mexicana.
Los dueños de los equipos, tras un encuentro en mayo, consideraron la posibilidad de adelantar esta medida, aunque se concluyó que se requiere, por lo menos, de un año adicional para que cuatro conjuntos de la Liga de Expansión MX logren certificarse y cumplan con los requisitos necesarios para el ascenso.
Actualmente, solo dos equipos, Leones Negros de la Universidad de Guadalajara y Atlante, han obtenido la certificación que les permitiría ascender a la primera división. En contraste, otros equipos como Venados de Mérida, Atlético de Morelia, Toros de Celaya y Mineros de Zacatecas están en proceso de obtenerla.
La reintroducción del descenso no sería inmediata; se necesitarían dos años después de permitir el ascenso para activar nuevamente el descenso de equipos. Además, existe un debate sobre si continuar con la Tabla de Porcentaje o emplear un nuevo sistema para determinar cuál equipo descendería.
Las reglas actuales dictan que para que un equipo de la Liga de Expansión ascienda, deben cumplir con varios requisitos establecidos por la Federación Mexicana de Fútbol. Estos incluyen desde un expediente de afiliación y estructura institucional, hasta el manejo económico y el uso de recursos del Fondo de Mejoras. Específicamente, equipos como Tapatío, Coyotes de Tlaxcala, Correcaminos de la UAT, Cimarrones de Sonora y Alebrijes de Oaxaca aún deben cumplir con algunos de estos criterios para poder certificarse.
Previo a la suspensión del descenso, el esquema de la Liga MX contemplaba la bajada de tan solo un equipo por temporada, el cual era determinado por su posición en la Tabla de Porcentaje. Este mecanismo se distingue del utilizado en muchas otras ligas internacionales, donde es más común ver a más de un equipo descender cada temporada.
